La importancia de marcar límites: saber decir que no
Saber decir que no y poner límites son herramientas básicas de comunicación que en ocasiones no aplicamos o nos cuesta mucho hacerlo. Hay personas que, de forma sistemática, acceden a todo porque no saben negarse a las propuestas. Aunque muchas veces esto viene de un problema de indecisión de base, si no se tiene una opinión formada, es mucho más fácil persuadirnos.
Existen técnicas para aprender a marcar límites. Lo mejor para decir que no es dar un mensaje corto y asertivo, no es necesario justificar la respuesta. El tono y el estilo comunicativo también es muy importante, se debería acompañar el lenguaje verbal con el paraverbal, como por ejemplo los gestos. Hay una técnica llamada 'el disco rayado' que sirve sobre todo cuando nuestro interlocutor no para de insistir, pese a que ya hemos pronunciado un 'no' como respuesta. Esta consiste en repetir una y otra vez la misma frase de negación, por ejemplo: no gracias, no me interesa.