Principios básicos del estilo rústico
El estilo rústico en el diseño de interiores se caracteriza por su estrecha afinidad con la naturaleza y la simplicidad. Uno de sus principios fundamentales es el uso de materiales naturales y sin refinar, como la madera, la piedra y los tejidos orgánicos. La textura desempeña un papel crucial en este estilo, a menudo incorporando superficies ásperas y elementos desgastados que evocan un sentido de autenticidad y encanto rústico. Otra característica esencial es la paleta de colores, que tiende a incluir tonos neutros y terrosos que reflejan el entorno natural. Además, este estilo valora la artesanía y la calidad, favoreciendo muebles y accesorios que tengan un carácter distintivo y una sensación de permanencia. En conjunto, estos principios trabajan para crear espacios acogedores, cálidos y atemporales que celebran la belleza cruda de la naturaleza. Asimismo, puede beneficiarse de la incorporación de elementos naturales como plantas y elementos decorativos que evocan la vida al aire libre, lo cual refuerza su conexión con la naturaleza.