Rellenos dérmicos: qué son y tipos
Los rellenos dérmicos son sustancias utilizadas en medicina estética y dermatología para corregir y mejorar el aspecto de arrugas, pliegues y surcos en la piel, así como para proporcionar volumen y reafirmar áreas específicas del rostro. Estos productos se inyectan en la piel con el objetivo de restaurar la firmeza y elasticidad perdida debido al envejecimiento o a otros factores.
Están compuestos por diferentes materiales, como ácido hialurónico, colágeno, hidroxiapatita de calcio y polimetilmetacrilato, entre otros. Cada uno de estos materiales tiene características y propiedades únicas que determinan su duración, resultado estético y posibles efectos secundarios. Es crucial seguir las recomendaciones y cuidados post-tratamiento para minimizar riesgos y maximizar los beneficios estéticos.
Su aplicación es un procedimiento no quirúrgico y relativamente rápido, que se realiza en consultorios médicos bajo supervisión profesional. Los resultados suelen ser inmediatos y pueden durar varios meses o incluso años, dependiendo del tipo de relleno utilizado.