Ansiedad por la comida: cómo abordarla desde la nutrición
La ansiedad por la comida está influenciada por diversos factores fisiológicos que regulan el apetito y la saciedad. Hormonas como la leptina y la grelina juegan un papel clave en este proceso. La leptina, producida por las células grasas, envía señales de saciedad al cerebro, pero en personas con sobrepeso o estrés crónico, puede desarrollarse resistencia a la leptina, lo que aumenta el apetito. Por otro lado, la grelina, que estimula el hambre, puede desregularse en situaciones de ansiedad. A esto se suma el cortisol, liberado en momentos de estrés, que nos lleva a preferir alimentos ricos en grasas y azúcares como mecanismo de supervivencia. Además, neurotransmisores como la serotonina y la dopamina influyen en la relación con la comida, creando un ciclo de búsqueda de placer y consuelo emocional. Para aprender más sobre cómo controlar la ansiedad alimentaria a través de estrategias nutricionales, regístrate en nuestro próximo webinar. ¡Reserva tu lugar ahora!