Reparación de vehículos: preparación de superfícies para la pintura

La preparación de las superficies de los vehículos es un paso fundamental en el proceso de reparación antes de aplicar la pintura. Tiene como objetivo garantizar un acabado duradero y de alta calidad. En primer lugar, se lleva a cabo una limpieza exhaustiva del vehículo para eliminar la suciedad, grasa y contaminantes presentes en la superficie.

A continuación, se realiza la descontaminación de la superficie utilizando métodos como el uso de arcilla descontaminante para eliminar cualquier partícula adherida. Esto permite asegurar una superficie libre de impurezas antes de proceder con los siguientes pasos. En casos de imperfecciones más profundas como arañazos o abolladuras, se realiza un proceso de lijado para nivelar la superficie.

Posteriormente, se aplica masilla de relleno para corregir irregularidades y se vuelve a lijar para obtener una superficie suave y uniforme. Finalmente, se aplica una capa de imprimación que mejora la adherencia de la pintura y brinda protección contra la corrosión.