Características del comportamiento pasivo-agresivo y cómo tratarlo

El comportamiento pasivo-agresivo es una forma de hostilidad indirecta que afecta negativamente las relaciones personales y profesionales. Este tipo de comportamiento se manifiesta mediante resistencia pasiva, procrastinación y falta de cooperación, lo que genera frustración y tensiones. La persona aparenta estar de acuerdo, pero sus acciones desmienten esa aparente conformidad. Para abordar eficazmente el comportamiento pasivo-agresivo, es crucial entender sus características clave: ambigüedad, incomprensión, actitud desafiante y autosabotaje. Estos comportamientos pueden surgir por factores psicológicos, experiencias previas o contextos familiares. A nivel relacional, este comportamiento perjudica la comunicación y la confianza, especialmente en entornos familiares y laborales. ¿Te interesa saber cómo manejar estas conductas de manera efectiva? En nuestro webinar, aprenderás técnicas psicológicas y herramientas de comunicación asertiva para reducir los comportamientos pasivo-agresivos y fomentar relaciones más sanas y respetuosas. ¡No te pierdas esta oportunidad para mejorar tu entorno personal y laboral!