Anatomía facial: ligamentos de retención

Existen varios ligamentos de retención en la cara, que, a su vez se pueden dividir en fasciocutáneos y osteocutáneos. Asimismo, estos ligamentos están formados por tejido conjuntivo fibroso y están intercalados entre los tejidos de la cara y el cuello, anclando las capas superficiales a las estructuras profundas más firmes. Las uniones fasciocutáneas son múltiples y existen en planos faciales secuénciales y su fuerza de anclaje varía según la región de la cara. los ligamentos osteocutáneos son los más fuertes y se encuentran entre el periostio y la piel suprayacente y tienen como objetivo mantener los tejidos blandos en su posición anatómica, resistiendo los cambios gravitacionales. Estos ligamentos contribuyen en mayor o en menor medida a mantener los tejidos blandos en su posición y oponiéndose a las fuerzas gravitatorias que son en gran medida responsables del envejecimiento facial. En el programa de hoy profundizaremos los conocimientos sobre los distintos ligamientos que constituyen la cara y sus funciones principales.